¿Te ha pasado en alguna clase de Yoga que a través de alguna postura, respiración o visualización, repentinamente aparece una emoción que muchas veces comienza como un dolor o sensación corporal y de repente literalmente “se toma” tu presente inundando tu cuerpo y tu mente?. Estoy segura que tu respuesta es afirmativa.
Uno de los poderes del Yoga es justamente hacer espacio para que todo lo que hemos acumulado, escondido o guardado en los distintos planos del SER se manifieste, sea observado y luego conservado o eliminado según sea el caso. La problemática está en que nadie nos enseña a “observar, a ser realmente “ese observador” que tiene la sabiduría necesaria para poder discernir entre el conservar y el dejar ir. ¿Por qué? Básicamente porque vivimos en una sociedad que no habla saludablemente de las emociones, que las esconde o las exacerba, que las agrava o las pueriliza y que nos ha enseñado a ser víctimas de ellas.
Sin embargo, las emociones nos acompañan todos los días.
Entonces, ¿no sería mejor para nuestro bienestar adquirir las herramientas para convivir con ellas sanamente y no tratar de controlarlas como si fueran un enemigo?.
Creemos fervientemente que las emociones son un pilar importante de nuestra salud, es por esa razón que en Yoga Orgánico trabajamos con la psicoemocionalidad de los órganos y sistemas del cuerpo humano….a ver, espérate!! ¿Cómo que psicoemocionalidad? ¿Cómo qué órganos y sistemas? Bueno, aquí me tengo que pegar un salto, para poder llegar donde quiero con este escrito. Para la psicología las emociones son “reacciones automáticas a estímulos relevantes para nosotros. Así, las emociones aparecen ante eventos tanto internos (imágenes mentales, pensamientos, sensaciones corporales) como externos (lugares, personas, situaciones, etc)” y tienen todo que ver con las situaciones que haya vivido esa persona, por lo tanto con su memoria, su aprendizaje y su realidad.
Cuando hablamos de psicoemocionalidad de los órganos y sistemas del cuerpo humano, estamos hablando que cada órgano tiene su propia personalidad acorde a su función en el organismo y a la forma que se relaciona y trabaja por mantener la homeostasis y la vida. Es así que cuando pensamos en el corazón, le otorgamos cualidades como la nobleza, la entrega, el compromiso, la disciplina o en nuestros riñones como depuradores, trabajadores, meticulosos, observadores, etc.
Esa comprensión, nos permite entender no solamente el equilibrio o desequilibrio del órgano o sistema, sino que también la raíz de la enfermedad. Entonces, esa visión más completa y profunda, nos permite seleccionar las herramientas yóguicas a utilizar y a diseñar una o varias prácticas de yoga con enfoque terapéutico.
La visión integrativa del Yoga es la oportunidad de tomar las sabidurías de distintas disciplinas afines con el objetivo de acompañar en forma eficiente los procesos de restablecimiento orgánico y de salud.
Retomando el párrafo sobre las emociones, éstas en su gran variedad, no debieran permanecer en nosotros más de algunos segundos o minutos. Sin embargo, las retenemos durante días, meses, años o toda la vida. Es por esto que queremos ser un aporte en el trabajo que están haciendo varias organizaciones, profesionales, terapeutas, etc. por aprender y enseñar a dejar fluir las emociones para que no se vuelvan dañinas y se manifiesten en enfermedades físicas o mentales.
Dejar fluir las emociones significa, primero que todo, reconocer que existen para después darse cuenta que son más pequeñas que “yo” y que “no son el yo” que en verdad soy más grande y que puedo dejar que se vayan si ya no las necesito o me aportan.
La práctica de Yoga otorga la oportunidad de observar con detención aquella manifestación de la emoción, ya que uno de sus objetivos es llevar luz a esos espacios de oscuridad en los que muchas veces (por no decir todas) se acumulan emociones vinculadas a experiencias, memorias, personas e incluso modelos o creencias heredadas. El poder observarlas es ya el primer paso en el camino de la sanación.
Aquí te compartimos una pequeña práctica basada en el Yin Yoga para liberar emociones que publicamos en nuestro Instagram hace unas semanas:
¡Gracias por leernos y por ser parte de esta familia orgánica!
Namasté,
Paloma Olivares
Co-Directora de YOGA ORGÁNICO Y.O.®
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